Bilbao y Bizkaia aún necesitan ruedines

Según se publicita en Europa, la Semana Europea de la Movilidad (16-22 septiembre) es una campaña de concienciación dirigida a sensibilizar a la ciudadanía en cuanto al uso del transporte público, la bicicleta y los desplazamientos peatonales. Pero también se dirige a animar a las ciudades europeas a que promuevan estos modos de transporte y a que inviertan en las nuevas infraestructuras necesarias para esto (https://mobilityweek.eu/home/)

Sin duda, este es justo el caso de Bilbao, cuyo acto más significativo para esta Semana, durante los últimos años, es quizá la exposición de coches eléctricos que organiza el Ayuntamiento en El Arenal, incluso haciéndolo coincidir con el Día Mundial Sin Automóviles (ONU).

Es evidente que Bilbao sigue apostando firmemente por el coche. Mientras que la Nueva Movilidad predicada por Europa tiene que ver más con las alternativas al coche, aquí seguimos esa onda muy lentamente, tan es así, que nuestra Nueva Movilidad se desliza en bici de ruedines. Porque, ¿cuánto tiempo esperaremos para ver implementada una solución ciclable por El Canal, el bidegorri de Zumalakarregi, o el Plan Estratégico de la Bicicleta?

En Bizkaia, las cosas no están mejor. La rapidez es para proyectos automovilísticos como los de la Supersur o el Subfluvial, mientras se guardan en cajones durante décadas los sucesivos planes territoriales ciclables.

“Ahora no toca” es lo que se dice en los despachos de quienes nos gobiernan, mientras se decretan emergencias climáticas que son combatidas con más de lo mismo, con Vieja Movilidad.

Recordamos que seguimos buscando conocer casos de ciclistas que hayan sido multados/as por ir en bici en Bilbao aquí