Los días 20 y 21 de febrero se realizará en Bilbao ”SUM Bilbao 19” un congreso que pretende reflexionar sobre el futuro de la movilidad urbana sostenible en las ciudades del siglo XXI.
La propia organización del congreso dice apostar por la puesta en marcha y consolidación de los nuevos modelos de movilidad a través de la formulación de políticas públicas con la participación de la ciudadanía a través de mecanismos “bottom-up” (de abajo a arriba).
Si bien en la elaboración del PMUS (Plan de Movilidad Urbana Sostenible) se ha intentado dar cabida a la participación pública, esta ha sido insuficiente y queda muy lejos de lo que debería ser un verdadero proceso participativo que tenga en cuenta las aportaciones de los agentes sociales. La participación ciudadana debe ir mucho más allá de la creación de una página web, votar unas prioridades de un listado o realizar unas reuniones de las cuales las aportaciones realizadas posteriormente no son recogidas en declaraciones y documentos.
Volvemos a reclamar las prioridades para que Bilbao se convierta verdaderamente en una ciudad sostenible, y a las que las instituciones en general, y el ayuntamiento de Bilbao en particular hacen caso omiso:
● No a una ciudad para uso exclusivo del coche. Bilbao sigue priorizando el coche dentro de la ciudad siendo para este ayuntamiento la principal forma de moverse de un barrio a otro. Incluso dentro de los barrios se sigue priorizando la movilidad de los automóviles por encima de peatonalizaciones, zonas verdes o eliminación de puntos negros.
● No a la ampliación de la Super Sur. Con un gasto de 800 millones, 47 millones/km cuando no llega al 50% de la demanda ESPERADA, se está potenciando el uso del vehículo privado, a través de una autopista infrautilizada que destruye la última reserva natural de Bilbao de gran valor en su biodiversidad, como es Bolintxu.
● No a una ciudad con altos incides de polución en el aire. El ayuntamiento sigue intentando enmascarar los resultados ubicando los medidores de calidad del aire en zonas que no reflejan la realidad. Las autopistas que dividen barrios en dos deben ser eliminadas para reducir los índices de contaminación y recuperar espacios de ocio para la ciudadanía
● Si a la conexión entre barrios. Bilbao debe apostar por conectar los barrios de la ciudad con el conjunto del área metropolitana mediante líneas de metro. Son muchos los barrios de la ciudad que están fuera de la red de metro dificultando su movilidad y obligados a utilizar medios de transporte más contaminantes.
● Si a la integración del transporte público. Es imprescindible que Bilbao y Bizkaia cuenten con un billete único, válido en todos los medios de transporte, con tarifas integradas y trasbordos gratuitos.
● Si a una ciudad en la que andar en bici no sea una actividad de alto riesgo. Bilbao sigue teniendo un profundo déficit a lo que red de bidegorris se refiere, a definir espacios compartidos con otros medios de transporte, a calmar el tráfico a crear avanzadillas en semáforos y a realizar pedagogía con la norma de adelantar a las y los ciclistas con metro y medio de distancia.
La coorganización del congreso por parte de Petronor, una de las empresas vascas más contaminantes y con menor respeto al medioambiente y a la salud de la sociedad de Bizkaia nos hace preguntarnos: ¿No estamos en realidad poniendo al zorro a cuidar del gallinero?
Igualmente, con la firma a la finalización del congreso de la “Declaración de Bilbao” documento que pretende ser un referente internacional, creemos que quedan claras la actitud e intenciones de un alcalde y su ayuntamiento más preocupados por conseguir eco internacional y marketing político que por acercarse a los verdaderos problemas e intereses de la ciudadanía.
Por todo lo anterior, mostramos nuestro enfado por la forma en la que se está realizando este congreso y emplazamos al ayuntamiento a estrechar el contacto con los diferentes agentes sociales de la villa que trabajan en el día a día por mejorar nuestra ciudad y convertirla en un lugar más amable, sano y cómodo para vivir.