Cejecutiva-biciada vez son más las mujeres y hombres de negocios que recurren a la bicicleta como medio de transporte en Bilbao. “No se trata de una moda”, afirma Rosa, socia en una important
e asesoría laboral instalada en la capital vizcaína, “la bicicleta me garantiza que voy a llegar a tiempo a las reuniones que me surgen a lo largo de la jornada”. Ir andando es otra opción, “pero en bici ahorro tiempo y me ayuda a despejar la cabeza entre cita y cita”.
Pero no todo son ventajas: “me gusta andar en bici, la utilizo también en mi tiempo de ocio, me desenvuelvo bien con ella. Pero entiendo que no cualquier persona se atreva a salir a la calzada, a ”pelearse” por el espacio con los coches. Bilbao es una ciudad hostil para el ciclismo urbano”. Y parece que tampoco es fácil encontrar un lugar donde aparcar: “llevo un buen candado, pero hay muy pocos aparcabicis en Bilbao. Los compartidos con las motos están siempre ocupados por ellas y es muy complicado encontrar un lugar específico para bicicletas”. Confiesa que normalmente ata la suya a farolas o barandillas, en lugares bien visibles, “para evitar robos, aún a riesgo de que alguna patrulla de la policía municipal pueda multarme”.
A pesar de ello, seguirá utilizando la bicicleta en sus desplazamientos urbanos, “la he incorporado a mi vida cotidiana y me funciona perfectamente. En Europa es algo normal y es curioso que aquí, con la gran afición que hay hacia el ciclismo, la bicicleta como medio de transporte tenga tan poco tirón”. “Hace falta un cambio de mentalidad entre las usuarias pero, sobre todo, una apuesta decidida y valiente de los responsables municipales”, concluye Rosa.